miércoles, 17 de abril de 2013

Virasana


Virasana es la postura de un guerrero sentado.

La practica regular de Virasana ayuda a desarrollar fuerza y resistencia. Expande el pecho e incrementa la capacidad de respirar profundamente. Virasana alivia la rigidez de las articulaciones y mejora la flexibilidad de todo el cuerpo.

Es una magnifica postura restauradora para revitaliza y relajar las piernas cuando están cansadas después de las posturas de pie.

Puede utilizarse para sentarse en meditación.



Virasana paso a paso.

- Arrodíllese en el suelo con las rodillas juntas y empeines apoyados en el suelo.
- Separe los pies entre sí algo más de la anchura de su cadera.
- Los dedos de los pies dirigidos hacia atrás y en contacto con el suelo alargando activamente los dedos de los pies hacia atrás
- Antes de sentarse completamente en el suelo,  con sus manos,  lleve la piel de sus rodillas posteriores y la parte superior de sus gemelos hacia el  talón y  también hacia fuera. Este ajuste crear espacio en sus rodillas posteriores, también entre su muslo externo y su gemelo interno, facilitando la postura.

- Siéntese en el  suelo entre sus dos pies. (Si no puede apoyar las nalgas en suelo, coloque dos o 3 mantas debajo de sus nalgas)

- Mantenga las rodillas juntas.
- Siéntese sobre los huesos frontales de sus nalgas.
- Mantenga las ingles suaves y relajadas al igual que sus muslos frontales para que bajen y se hundan hacia el suelo.
- Todos los dedos de pie deben de estar en contacto con el suelo, sobre todo el dedo pequeño que tenderá a elevarse,  esto significa que será necesario presionar los dedos meñiques hacia abajo y elevar sus talones internos hacia el techo.
- Sin inclinar el cuerpo hacia delante y sin hundir sus lumbares hacia delante, alargue el tronco desde el pubis al esternón y el esternón hacia el techo, sin tensar el diafragma y continuando con los huesos de sus nalgas firmemente apoyados en el suelo.

- Lleve ligeramente sus hombros hacia atrás  y baje sus trapecios.
- Eleve y expanda horizontalmente su pecho desde el esternón hasta los hombros a la vez que absorbe los omóplatos posteriores dentro de la espalda, sin proyectar las costillas flotantes hacia delante.
- Puede girar los brazos hacia fuera y colocar las palmas de las plantas de los pies, para ayudarle  a abrir su pecho.
- Mantenga su cabeza en línea con su tronco y su mirada al frente.
- Relaje los músculos de su rostro, boca y garganta.
- Mantenga la postura entre 1 a 5 minutos con una respiración lenta y suave
- Esto es Virasana

Beneficios de Virasana.
- Alivia para los que sufran dolores en los talones o excrecencias del calcáneo
- Útil para personas con pies planos, debido a la extensión de tobillos y pies se formaran los arcos correctos de los pies. Requiere largo tiempo y una práctica diaria
- Reduce la hinchazón de las piernas.
- Expande el pecho e incrementa la capacidad de respirar profundamente.
- Alivia la rigidez de las articulaciones de las piernas y mejora la flexibilidad de todo el cuerpo
- Es una magnifica postura restauradora para revitaliza y relajar las piernas cuando están cansadas después de las  posturas de pie

Variación: Parvatasana en Virasana

- En Virasana.
- Entrelace los dedos de sus manos
- Estire sus brazos hacia delante a la altura de sus hombros.
- Gire sus manos con los dedos entrelazados hacia fuera (pulgar hacia abajo).



- Eleve sus manos con los brazos completamente estirados hasta que las palmas de sus manos miren al techo.
- Manténgase el tronco elevado y el pecho expandido, eleve las lumbares hacia las dorsales
- Absorba y eleve sus omoplatos posteriores  hacia su esternón.
- Mantenga su cabeza en línea con su tronco y su mirada al frente o hacia las manos cuidando las vértebras cervicales.
- Relaje los músculos del rostro, boca y  garganta
- Baje sus brazos, cambie el entrelazamiento de sus dedos y repita.

Variante de Virasana



Siéntese de manera que uno de los tobillos quede al lado de la nalga opuesta. Cruce la otra pierna, hasta que el otro pie vaya a descansar en el piso, al lado del muslo. Las manos reposando sobre la rodilla, conserve el busto y la cabeza lo más correctamente posible.En lo restante, proceder como en la postura Vajrasana (pose del diamante)